Educación financiera

Consejos para inculcar la educación financiera en casa

Según la última encuesta de finanzas personales que lanzamos desde Creditea, el 79% de los españoles considera muy importante impulsar la educación financieradesde edades tempranas. Nosotros no podemos estar más de acuerdo, ya que, para gestionar correctamente nuestras finanzas personales, es imprescindible involucrar a t...

30 de septiembre de 2022 · Tiempo de lectura 6 min

Según la última encuesta de finanzas personales que lanzamos desde Creditea, el 79% de los españoles considera muy importante impulsar la educación financiera desde edades tempranas. Nosotros no podemos estar más de acuerdo, ya que, para gestionar correctamente nuestras finanzas personales, es imprescindible involucrar a toda la familia. Es por esto por lo que, desde Creditea, te ofrecemos los mejores consejos para poder inculcar la educación financiera en casa. ¿Empezamos?

1. Hacer una adecuada gestión económica de los recursos financieros

Nuestros recursos financieros no son inagotables. Tenemos que tener muy claro el dinero del que disponemos y cómo administrarlo en caso de ausencia de ingresos. Por esto, lo primero que debemos hacer para conseguir una adecuada gestión financiera de nuestros recursos es calcular el patrimonio del que disponemos. A partir de aquí, podemos clasificar los gastos mensuales para hacernos una idea de cuánto dinero vamos a gastar y cuánto podemos ahorrar.

Tras conocer el dinero que ingresamos de forma mensual y saber cuáles son los gastos indispensables y de cuáles podemos prescindir, es una buena idea elaborar un presupuesto mensual. De esta forma, podremos destinar cierta cantidad a la comida, otra parte a los gastos del hogar, otra al ocio… Por supuesto, es importante involucrar a toda la familia en este punto, ya que, en caso contrario, no nos servirá de nada. Para ello, podemos elaborar el presupuesto entre todos, también con la ayuda de los más pequeños, explicándoles en qué consiste la economía familiar y por qué es cada vez más relevante la economía sostenible.

De esta manera tendremos controlado el dinero que manejamos habitualmente, tanto los ingresos como los gastos, anticipando aquellas situaciones excepcionales de riesgo financiero para evitar que descuadren nuestra economía. Igualmente, si toda la familia participa en este proceso, será más fácil optimizar nuestro presupuesto mensual y podremos fijar objetivos a corto y medio plazo.

2. Impulsar la educación financiera para los niños

Enseñar a nuestros hijos todo lo necesario para manejar correctamente su dinero les ayudará muchísimo en un futuro, siendo mucho más posible que gestionen correctamente sus finanzas personales llegado el momento. Para ello, además de involucrarles en la economía familiar, o de apuntarles a alguna actividad de economía para niños, hay varias cosas que podemos hacer para inculcar la educación financiera entre los más pequeños. Te dejamos algunos consejos:

  • Permite que ellos manejen su propio dinero, o incluso que en ocasiones sean ellos los que paguen y los que recojan las vueltas. Así, podrán aprender a utilizar el dinero y a comprender cómo funciona.
  • Ayúdales a comprender el concepto de ahorro y el de gasto. Para ello, podemos darles algo de propina y permitir que vayan guardando algo de dinero, entendiendo las diferencias entre necesidades y deseos. De la misma manera, si llegado el momento quieren darse un capricho, no debemos impedirlo, ya que así comprobarán también lo útil que puede ser ahorrar y se sentirán más motivados.
  • Otro factor importante es recordarles los valores que tienen los billetes o las monedas. Para este punto, un buen truco que podemos poner en práctica es repartir el dinero que vamos a darles en monedas o billetes de distinto valor, ya que así aprendan a diferenciarlo y a conocer el valor de cada uno.
  • Mantén con ellos un sistema de organización de su dinero, como si se tratara de un presupuesto individual. Así, aprenderán a llevar el control de sus ingresos y gastos. Puedes dejar que sean ellos los que tomen algunas decisiones, aunque puedan ser equivocadas, ya que así poco a poco irán aprendiendo.
  • Llévalos a abrir su propia cuenta bancaria, porque se implicarán más y entenderán la importancia del ahorro.

3. Aprender los términos económicos más comunes

Muchas personas desconocen ciertos términos en el ámbito financiero que son imprescindibles para tener una buena educación financiera. Son términos que, a priori, pueden parecer complicados, pero si intentamos familiarizarnos con ellos, o tenemos a mano un diccionario económico, enseguida nos haremos con ellos. En un mundo tan económico como el que habitamos, debemos tener ciertos conocimientos financieros básicos para poder entender mucho mejor las finanzas. Para ello, podemos echar mano de Internet, y, si no sabéis por dónde empezar, no os podéis perder nuestro post de términos financieros para el día a día que todos deberíamos conocer.

Por supuesto, es importante que los más pequeños conozcan también estos términos. No es necesario que empecemos por los conceptos o indicadores financieros más abstractos, como el TIN o el TAE, pero cada día nos encontraremos con muchas situaciones en las que podemos introducirles algunos de los conceptos más básicos, explicándoles qué es una oferta, una rebaja, una subida de precio, etc. Si empezamos por esos pequeños detalles, poco a poco podremos ir introduciendo términos más complejos, y además haremos que se sientan más interesados por la economía familiar y que vayan descubriendo el mundo de las finanzas personales.

4. Profundizar más con un curso de educación financiera básica

Una vez que estamos familiarizados con la educación financiera, es una muy buena idea profundizar un poco más para convertirnos en unos auténticos especialistas de la gestión para dominar las finanzas personales. Para ello, desde Creditea os proponemos realizar actividades o cursos sobre el tema que os ayuden a aprender nuevas cosas relativas a las finanzas.

De esta manera, podremos informamos y transmitir esos conocimientos a toda nuestra familia. Algo muy útil y que está al alcance de todo el mundo. Por si acaso, aquí te dejamos unos cuantos recursos a los que puedes acudir para mejorar tu educación financiera:

  • Blogs de internet: Internet está lleno de expertos en economía que ayudan a comprender las finanzas de una manera más sencilla y accesible para todos, dándonos mucha información que desconocemos. Además, al tratarse de un blog, podemos acudir a él tantas veces como sean necesarias para entenderlo todo bien.
  • Cursos de finanzas: Si queremos ir un poco más en serio, hay multitud de cursos, a un precio económico, que nos van a ser muy útiles para ampliar nuestra educación financiera. Para ello, podéis acudir a los cursos de educación financiera, contabilidad y finanzas que se ofrecen en alguna universidad o escuela de finanzas. De hecho, desde Creditea, el año pasado sorteamos varias becas a través de nuestro Programa de Educación Financiera, con el objetivo de ayudaros a mejorar la gestión de vuestras finanzas personales.
  • Vídeos informativos de algunas plataformas online: Son muy similares a los blogs, pero más audiovisuales, por lo que puede ser un método interesante de aprendizaje, más dinámico y entretenido.
  • Libros: Aunque pueden resultar un poco más densos, hay multitud de libros de educación financiera que pueden ser muy útiles para ampliar nuestra formación y, además, sus contenidos cada vez están más adaptados a los diferentes perfiles, por lo que sea cual sea nuestro nivel de conocimiento podremos encontrar un libro que nos sea útil.