Frases como “lo que es mío es tuyo”, “no se trata de que no compres nada, sino de que no tengas que comprarlo todo” están detrás de un nuevo modelo de consumo: la economía colaborativa. ¡Veamos de qué trata!

Definición de economía colaborativa

Cuando hablamos de economía colaborativa lo hacemos de una actual práctica en la que dos o más personas llegan a un acuerdo para satisfacer una necesidad concreta.

Imaginemos, por ejemplo, que en algún momento queremos ceder o desprendernos de alguno de nuestros bienes y que, por otro lado, hay una persona que los quiere o que los necesita. Pues bien, la economía colaborativa es aquella que permite que ambos puedan interaccionar (vía online, generalmente) y llegar a un acuerdo mediante el cual ambos salgan beneficiados.

Cuanto mayor es la dimensión de la plataforma a través de las que se produce el primer contacto entre los interesados, más eficiente es su uso y más amplia la oferta y demanda que se genera.

Desde que Ray Algar presentara el concepto de consumo colaborativo en el boletín Leisure Report, (hace ahora 12 años), esta nueva modalidad ha supuesto un gran cambio cultural y económico en los hábitos del consumidor.

Tipos de economía colaborativa

Podemos clasificar los negocios de economía colaborativa en tres sistemas diferentes:

• Producto. Aquí pagaríamos por el beneficio de utilizar un producto o servicio sin necesidad de que sea de nuestra propiedad. Por ejemplo, rentar un apartamento para pasar unos días de vacaciones.
• Mercados de redistribución. Se trataría de redistribuir los bienes o servicios usados hacia personas que los necesitan. Aquí entrarían, especialmente, los mercados de segunda mano.
• Estilo de vida colaborativo. Se trata de gente con intereses u objetivos comunes que se juntan para compartir tiempo, espacios, o dinero. Por ejemplo, alquilando un espacio de co-working o compartiendo un coche a través de diversas aplicaciones móviles.

Ventajas y desventajas de la economía colaborativa

Muchos medios y organismos se han pronunciado ya acerca del consumo colaborativo:

• La revista Time afirmaba que se trata de una de las diez grandes ideas que cambiarán el mundo. New York Times también publicaba que gracias a este concepto se crean nuevas formas de emprendimiento y un nuevo concepto de propiedad.
• El Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) incluso calculó el potencial del concepto, valorándolo en 110.000 millones de dólares. Según la revista Forbes estaríamos hablando de 3.500 millones de beneficios.

Y es que la idea del consumo colaborativo tiene una ventaja clara: facilita el acceso a bienes y servicios que cubren necesidades y a los que, quizás, de otra forma, muchos no podríamos acceder. Pero no es el único beneficio de este tipo de consumo, ya que, además:

• Permite el intercambio de bienes y servicios sin necesidad de traspasar la propiedad de los mismos.
• Las barreras de desconfianza son mínimas gracias a las valoraciones de perfiles de usuarios y a las referencias que van añadiendo los propios usuarios que utilizan y prueban el producto o servicio.
• Se crean nuevos espacios para relacionarse, intercambiar y monetizar habilidades o bienes.
• Suele tratarse de proyectos que promueven beneficios medioambientales y la creación de capital social. Es decir, promueve el desarrollo sostenible mediante la idea de un segundo uso de los productos a partir de gente que lo necesita (gracias al cese de personas que lo han usado y ya no lo necesitan).
• Los precios de los bienes y servicios son más baratos porque el margen de las plataformas suele ser reducido, aunque depende mucho de cada una.
• Garantiza una mayor oferta, gracias a la ampliación de servicios compartidos y productos de segundo uso.
• Potencia el denominado“Human factor”. Con la economía colaborativa se avivan las relaciones sociales.
• Facilita el emprendimiento. Junto con sistemas como el crowdfunding o incluso financiación a partir de créditos, la economía colaborativa ha facilitado la creación de proyectos a partir de ideas innovadoras que han dado lugar a distintas plataformas basadas en este modelo de consumo.

Respecto a las desventajas de la economía colaborativa:

• No cuenta con una regulación específica. El vacío legal en lo que respecta a accidentes, responsabilidad y cobertura de seguros siembra la duda sobre este nuevo modelo de consumo.
• En determinados sectores, hay disconformidad en cuanto a los salarios de los trabajadores, especialmente en lo que respecta a las jornadas completas.

¡Profundicemos más en estos ejemplos!

Ejemplos de economía colaborativa

Como decíamos, tenemos muchos casos de economía colaborativa vinculados, especialmente, a la venta de artículos de segunda mano, al alquiler de vivienda vacacionales y al transporte en ciudades (y fuera de ellas). ¡Vamos a analizarlos!

Venta de artículos de segunda mano

A través de este tipo de aplicaciones se pueden comprar y vender objetos usados, contactar con el vendedor a través de un chat e incluso realizar el pago online, algo nuevo, pues, inicialmente las transacciones se realizaban en persona.

El comprador y el vendedor fijan una fecha y un lugar para intercambiar el producto mostrado en la plataforma, promoviendo un segundo uso para él y cubriendo tanto la necesidad del vendedor como la del comprador.

Alojamiento vacacional

Encontrar alojamiento barato nunca ha sido más sencillo. Hoy en día existen plataformas con un amplio catálogo de apartamentos y casas registradas; a disposición del usuario.

El procedimiento es similar al anterior: comprador y vendedor se ponen en contacto y fijan los términos de la transacción.

Transporte en ciudades y fuera de ellas

Existe, además, una modalidad de economía colaborativa muy explotada en lo relativo a transporte, generalmente, en el interior de las ciudades, pero no únicamente en ellas.

Este tipo de iniciativas nacieron con el objetivo de satisfacer la necesidad de un usuario que prefiere compartir trayecto con otros y pagar el importe a medias que asumir los costes que implica el viajar solo.

Tras beneficiarse del servicio, el usuario tiene la opción de valorar su experiencia a través de la misma plataforma y dar, así, feedback a la empresa sobre la calidad o no de sus servicios.

Y hasta aquí toda la información importante para entender qué es la economía colaborativa y cómo funciona. Y tú, ¿Qué opinas sobre esta nueva forma de consumo?